30.10.12

Des-canso.

Como esas hostias que terminan con un ataque de nervios.

No importa cuánto tiempo ni en qué medida duela, porque sabes que te ha librado de algo peor, que a partir de ahora conservarás la calma, pensarás dos veces, y caminarás por encima de la mierda que te pongan delante.

A veces, simplemente hay que agradecer todas las putadas que el viento nos estampa en la cara, sólo por el placer de ver dónde se estampan cuando el viento cambia de dirección.


Gracias, gracias, gracias.

No hay comentarios:

Por aquí han pasado..